viernes, mayo 11, 2012

Lunatic

¿Por qué nunca digo las cosas como debo?
Tú hazme caso, así te irá mejor, no dudes... Querida, llegas tarde.
La mayoría de mi vida es una interrogación retórica, esperando que alguien me grite la respuesta.
También es miedo al rechazo, a una negativa rotunda. Posiblemente me recuperaría, pero el miedo a llegar a tal punto me horroriza. Y huyo. No, abandono.
La seguridad en mí misma es una leve ilusión que puede que confunda con mi vacío orgullo.

2 comentarios:

  1. Puede que te estén gritando la respuesta pero tú no quieras escuchar.
    Vive, lucha por tener tu vida, no hay más, esa es la respuesta.

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  2. Interesante, muchas gracias, te tomaré la palabra :)

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